Hace unas semanas, una joven llamada Rubí alcanzó la fama luego de que se difundiera en redes sociales el video de la invitación de sus 15 años. Pese a las burlas y críticas, la fecha llegó y el pasado 26 de diciembre se llevó a cabo la fiesta en la hacienda La Joya, San Luis Potosí, centro de México.
Millones de interesados virtuales en las redes tomaron literalmente las candorosas palabras del padre de Rubí Ibarra García, un ranchero que dijo “están todos cordialmente invitados” a la fiesta, dirigido a los habitantes de la comunidad rural de la Hacienda La Joya, San Luis Potosí.
El padre de la homenajeada explicó que la idea era invitar sólo a los vecinos y amigos pero aseguró que no rechazaría a nadie. Para ese 26 de diciembre, se prepararon mesas y carpas para servir y atender a los miles que llegaron de diferentes partes del país.
El gobernador de San Luis Potosí, Juan Manuel Carreras, fue uno de los invitados destacados, quien le regaló a Rubí una computadora y libros. También hubo otros asistentes más informales que llegaron en autos, en motocicleta y hasta a pie.
Se conoció que durante las primeras horas del evento ya habían llegado unas 3 mil 500 personas y el número fue creciendo. «Estaba bastante concurrido, llegó gente de todo el país y televisoras de cadenas internacionales», explicó una vocera de la policial estatal.
Rubí visitó un traje fucsia con una diadema de brillantes y lucía un tanto seria, tal vez abrumada por ser el centro de atención y la quinceañera más famosa de México.
Entre las variadas actividades de esparcimiento dentro de la festividad hubo una carrera de caballos, una «chiva» con un premio de 10 mil pesos al ganador, donde uno de los jinetes participantes murió al caer de su montura y posteriormente ser arrollado por el caballo.
Con información de BBC