Egipto, Baréin, Kuwait, el Líbano y Emiratos Árabes Unidos condenaron este domingo el ataque en Estambul contra la discoteca Reina, en el que murieron 39 personas.
El presidente del Líbano, Michel Aoun, envió un mensaje de pésame a su homologo turco, Recep Tayyip Erdogan, en el que condenó el ataque y manifestó la importancia de la cooperación y coordinación para hacer frente al terrorismo y eliminarlo de raíz.
Entretanto, el Ministerio de Asuntos Exteriores egipcio expresó en un comunicado su solidaridad para acabar con este «fenómeno abominable», que a su juicio amenaza a todos los pueblos del mundo sin distinción entre religión o raza.
Asimismo, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Baréin condenó enérgicamente el ataque terrorista «brutal» y expresó sus condolencias al gobierno turco y a los familiares.
En un comunicado difundido por la agencia de noticias oficial de Baréin, el Gobierno expresó su solidaridad con la República «hermana» de Turquía y su rechazo a la violencia y al terrorismo.
El Gobierno de Emiratos también condenó el atentado en un comunicado de su Ministerio de Asuntos Exteriores, en el que indicó que la violencia y el terrorismo invitan a «reforzar al cooperación internacional para erradicar esta peligrosa plaga que amenaza la seguridad y la estabilidad en todo el mundo».
DE igual forma, Kuwait rechazó el ataque «terrorista brutal», en el que denuncia «la brutalidad de las prácticas terroristas».