Los restos del líder socialista Fabricio Ojeda llegaron este lunes al Panteón Nacional, en medio una masiva movilización que realizó el pueblo venezolano por las calles de Caracas.
La movilización partió desde el Cementerio General del Sur, pasó por Roca Tarpeya, la avenida Fuerzas Armadas, el mercado de La Hoyada, la avenida Universidad; siguió por la avenida Baralt y las afueras de la sede del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), hasta llegar al Panteón, en el centro de Caracas.
El presidente de la República, Nicolás Maduro, recibió los restos mortales del líder revolucionario.
El jefe de Estado decretó el traslado del dirigente revolucionario al Panteón, como un proceso de reivindicación hacia las batallas sociales que se libraron en Venezuela, primero contra la dictadura de Marcos Pérez Jiménez en 1958, y luego al desligarse Ojeda de su puesto en el Congreso Nacional, casi 4 años después para unirse a la guerrilla.
«Fabricio Ojeda encarna el espíritu del 23 de Enero y de la Juventud Patriota que luchó por nuestra Patria. Ejemplo de Lealtad Revolucionaria», escribió el Presidente a través de las redes sociales.
El 20 de junio de 1966, Fabricio Ojeda fue capturado en La Guaira, estado Vargas, por el Servicio de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (SIFA). En extrañas circunstancias, a dos días de su aprehensión, apareció asesinado en su celda, que estaba ubicada a escasos 200 metros del despacho presidencial, con signos de tortura.
Con información de AVN