Mediante un comunicado, publicado en el portal web del Ministerio para Relaciones Exteriores, Venezuela señala que esta reunión viola «abiertamente la normativa del Mercosur, así como normas básicas del Derecho Internacional», debido a que los «gobiernos de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay han sido demandados por Venezuela con base en el Protocolo de Olivos para la Solución de Controversias en el Mercosur».
A continuación el texto íntegro:
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA RELACIONES EXTERIORES
COMUNICADO
La República Bolivariana de Venezuela expresa categórica protesta por la ilegal celebración de una Cumbre de Jefes de Estados del MERCOSUR y Estados Asociados y una reunión ordinaria del Consejo del Mercado en la ciudad de Mendoza, República Argentina, los días 20 y 21 de julio de 2017.
Venezuela ha decidido soberanamente no asistir a las referidas reuniones, que carecen de total legalidad, por violar abiertamente la normativa del MERCOSUR así como normas básicas del Derecho Internacional, en momentos en los cuales los gobiernos de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay han sido demandados por Venezuela con base en el Protocolo de Olivos para la Solución de Controversias en el MERCOSUR, por las continuas arbitrariedades y perjuicios ocasionados contra los derechos que asisten a la República en su condición de Estado Parte de la organización.
En ese contexto, la convocatoria a estas reuniones, y cualquier otro espacio que pretenda arrojar decisiones de cualquier índole, quebrantan el principio de buena fe que debe regir entre las partes de la controversia, afectan el desarrollo del procedimiento arbitral actualmente en curso, y carecen de validez alguna, pues atentan contra la regla del consenso estipulada por los Tratados fundacionales del MERCOSUR.
Resulta alarmante el permanente uso temerario del mecanismo de integración al servicio de una política de hostigamiento al gobierno y al pueblo de Venezuela con la convocatoria a un conjunto de reuniones que tienen la intención de aprobar decisiones sobre el MERCOSUR para generar una sensación de normalidad que no es tal, así como para disimular el estancamiento en que se encuentran los principales acuerdos comerciales de interés para el bloque.
Peor aún, es que por primera vez en once años, no se realizará la Cumbre Social del MERCOSUR, suspendida por petición del gobierno argentino que alegó que «no estaban dadas las condiciones para su realización». La Cumbre Social del MERCOSUR fue una conquista popular celebrada ininterrumpidamente desde el año 2006, una victoria alcanzada gracias al progresismo de ex-presidentes de la talla de Chávez, Kirchner o Lula, que hoy los gobiernos confabulados de la nueva Triple Alianza pretenden olvidar. La suspensión de esta actividad es clara muestra del temor de estos gobiernos a los propósitos y anhelos de las organizaciones y movimientos sociales de la región.
La República Bolivariana de Venezuela, fiel a su vocación integracionista legada por el Comandante Hugo Chávez, hace un llamado a preservar los logros alcanzados colectivamente en beneficio de la integración regional, reclama el respeto a las normas del Derecho Internacional y exige el cese de las acciones antijurídicas de acoso en perjuicio de los derechos de Venezuela como Estado Parte del MERCOSUR.
Con información de AVN