El alemán Michael Schumacher podría ser trasladado a Estados Unidos para ser tratado debido a que lleva años en coma y un estado físico que preocupa a su familia, ya que no presenta ninguna evolución.
La familia del mítico piloto de Fórmula 1 estudia la posibilidad de que sea tratado en una clínica en la localidad de Dallas, en el Estado de Texas, en EEUU, encomendándose así a un nuevo tratamiento que les da esperanzas de una salida de este túnel tan oscuro que golpea a Michael desde 2014.
En Texas hay un especialista en lesiones cerebrales, Mark Weeks, quien habría ofrecido garantías sobre pacientes con este tipo de lesiones. «Probablemente no haya clínica en Europa que trate tantos casos como nosotros», según información del Diario Crítico.
El heptacampeón del mundo sufre graves lesiones cerebrales después de su accidente mientras practicaba esquí en diciembre de 2013. Tras superar los peores momentos críticos, continuó en coma desde 2014 y no ha habido novedades positivas desde entonces, más de 3 años.
Schumacher se encuentra en una residencia de su propiedad en Ginebra, Suiza, después de que su esposa, Corinna, decidiera que no siguiera siendo tratado en la clínica donde salvaron su vida.
El deseo de la esposa del ex piloto de F1 era que estuviera en casa y esperar que eso repercutiera en su recuperación, pero 3 años después han perdido las esperanzas, por lo que estudia ahora regresar a una clínica, esta vez en EEUU.
En todo este tiempo, Schumacher se ha perdido la evolución profesional de su hijo Mick, también piloto, quien promete ser un futuro sucesor de sus glorias en la F1.