Siempre se ha hablado del encanto que despierta el árbol de Navidad en las mascotas de la casa, sobre todo en los gatos.
Sus luces y los singulares adornos se convierten en un atractivo para las mascotas que no paran de jugar durante esta época decembrina.
Los adornos, que en muchos casos son bastante costosos, terminan en el piso y destruidos por estos pequeños traviesos.
Con información de El País