Una nueva normativa migratoria entró en vigencia esta semana en Israel, consiste en que esa nación pagará a los inmigrantes indocumentados 3.500 dólares para que dejen el país, o de lo contrario los encarcelará si son capturados después de finales de marzo.
Foto: ReferencialAdemás, ofrece un boleto de avión gratuito para que los indocumentados regresen a su nación de origen o vayan a «terceros países», que según grupos de derechos humanos son Ruanda y Uganda.
De acuerdo con la información del primer ministro Benjamín Netanyahu, sobre el programa de pagos, el muro que Israel completó en 2013 a lo largo de su frontera con Egipto impidió un flujo de «indocumentados» desde África después que unos 60.000 cruzaran la frontera en el desierto.
Para ese momento, en su mayoría provenía de Eritrea y Sudán y muchos dijeron que huían de la guerra y la persecución, así como de las dificultades económicas, pero Israel los trata como migrantes económicos.
Netanyahu, explicó que existe una la gran presencia de inmigrantes africanos en los barrios más pobres de Tel Aviv y que los israelíes ya no se sienten seguros. «Expulsamos a unos 20.000 y ahora la misión es sacar al resto», dijo.
Según inmigración en Israel viven unos 38.000 inmigrantes indocumentados en condición de anonimato, y unos 1.420 se encuentran detenidos.
«Después de finales de marzo, los que decidan irse voluntariamente recibirán un pago significativamente menor que se irá reduciendo con el tiempo, y se pondrán en marcha las medidas de aplicación», dijo el funcionario.
Netanyahu calificó la presencia de los inmigrantes como una amenaza para el tejido social y el carácter judío de Israel.
Con información de Actualidad RT