(Valencia, 12 de agosto. Noticias24 Carabobo) La cocina integral, basada en la alimentación sana y «limpia», es la tendencia dominante entre los gurús de la cocina de hoy. ¿Pasaron a la historia entonces los placeres pecaminosos? Parece que no. A pesar de la moda de comer sano, hay algunos alimentos y bebidas que nos atraen irremediablemente.
Una publicación de la BBC Mundo señala que la afición por alimentos que nos hacen sentir un poco mal después de comerlos, ya sea porque están llenos de grasa, azúcar, son altamente procesados o contienen aditivos y conservantes, sin duda no muestra signos de disminuir.
Y no ayuda que esas delicias estén a la vuelta de cada esquina. Son tan globales y accesibles que es difícil resistir la tentación. Y todos tenemos un punto ciego.
Las propiedades adictivas del azúcar, la grasa y la comida procesada han sido ampliamente comprobadas. Y aunque sabemos que hacen mal, los seguimos consumiendo. Pero al placer le sigue la culpa.
Culpa directamente proporcional a la porción, Las mujeres que hacen dieta experimentan mucha más culpa al comer que las mujeres que no la hacen, según un estudio reciente publicado en la revista Psicología y Salud.
La información completa la puede leer aquí