El tiempo de comer algo rico nunca se acaba, así que pon manos a la obra para preparar un jugoso postre de café con leche condensada.
El resultado es un delicioso bizcocho de miga densa y húmeda, muy tierna y que no excesivamente dulce.
Bizcocho de café con leche condensada, ingredientes
- 110 gramos de mantequilla
- 140 gramos de leche condensada
- 3 huevos
- 250 mililitros de café intenso
- 250 gramos de harina
- 1 sobre de levadura química en polvo
- Para decorar: 2 cucharadas de leche condensada
Preparación
Corta en dados 100 g de mantequilla y déjala a temperatura ambiente hasta que esté punto de pomada.
Enciende el horno 10-15 minutos antes de cocer el bizcocho y programa la temperatura a 180º, con calor arriba y abajo. Mientras, prepara la masa.
Vierte la leche condensada en el recipiente del robot de cocina. Casca los huevos, añádelos y bate hasta que obtengas una preparación bien cremosa.
Incorpora el café y la mantequilla, y continúa batiendo hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
Agrega la harina tamizada con la levadura y continúa batiendo durante 2 o 3 minutos más, hasta que consigas una masa sin grumos y homogénea.
Unta con el resto de la mantequilla el fondo y las paredes de un molde de plumcake y vierte en él la masa preparada; mueve el molde ligeramente para que la masa se distribuya de manera uniforme por el interior.
Introduce el molde en el horno, a media altura, y cuece el bizcocho unos 50 minutos, o hasta que al pinchar el centro con un palillo este salga limpio. Retíralo y deja que se enfríe antes de desmoldarlo.
Una vez listo, decora
Coloca la leche condensada de la decoración en un cacito y añade 2 cucharadas de agua; calienta hasta que se licue y deja templar.
Baña con la leche condensada la superficie del bizcocho; viértela a lo largo de la superficie, en un hilo, y extiéndela con una espátula.