El perfeccionismo casi acaba con la vida de un acróbata norcoreano en el mundial de arte circense Idol-2017, celebrado en Moscú. Intentaba establecer un nuevo récord con un salto mortal séxtuple y el resultado fue trágico.
Lo más curioso del hecho es que el artista consiguió con éxito dar seis vueltas en el aire, pero al no sentirse satisfecho pidió otra oportunidad. Lamentablemente, en ese segundo intento el acróbata perdió la orientación y cayó al suelo aterrizando sobre su cuello y perdiendo el conocimiento de inmediato.
El competidor fue hospitalizado en condiciones extremadamente graves, y los médicos le diagnosticaron una fractura de las vértebras cervicales y una lesión grave de la cabeza.
Con información de Actualidad RT
