Donde sea que esté en el mundo el Air Force One, avión de la Fuerza Aérea de Estados Unidos que transporta al presidente de los Estados Unidos,lo sigue de cerca un Boeing E-4B, conocido como el ‘avión del juicio final’ (‘doomsday’, en inglés).
Se trata de un Boeing 747 especialmente modificado que escolta al presidente de EE.UU., sobre todo cuando viaja al extranjero. En la flota aérea de Estados Unidos hay cuatro aeronaves de este tipo.
Los E-4B están equipados como centros de mando completos para el presidente y altos funcionarios, incluyendo al secretario de Defensa y a los jefes del Estado Mayor Conjunto en caso de una guerra nuclear o una emergencia nacional. Estas aeronaves tienen características únicas que no pueden ser comparadas con las ningún otro avión que utilice la Fuerza Aérea estadounidense.
Estos aviones también son capaces de hacer reabastecimiento en vuelo y de permanecer en el aire y en funcionamiento hasta más de 35 horas, aunque han sido diseñados para operar en vuelo durante una semana completa.
Los E-4B se encuentran apostados cerca de Omaha, Nebraska, en la base aérea de Offutt. Uno de los aviones se mantiene en marcha en todo momento, con el motor funcionando las 24 horas del día en la base, cuando el presidente se encuentra en territorio nacional. Si ocurre una emergencia, el avión está listo para servir casi inmediatamente al mandatario.
Con información de Actualidad RT