A tres años y medio de prisión en suspenso fue sentenciado este jueves un bloguero ruso luego de que subiera a Internet un video donde se lo veía jugando Pokemon Go en una iglesia, algo considerado ilegal en el país.
Un tribunal de la ciudad de Ekaterimburgo, en el centro-sur de Rusia, encontró a Ruslan Sokolovsky, de 22 años, culpable de los cargos de «insultar a los feligreses» e «incitar al odio».
Durante el juicio, Sokolovsky se declaró inocente.
Y a pesar de que le advirtieron que su acto podía tener consecuencias jurídicas, el joven se filmó mientras se divertía con el popular juego de realidad aumentada en el principal templo de la iglesia ortodoxa rusa en Ekaterimburgo, en agosto de 2016 y lo subió a internet, por lo que poco después fue arrestado por la policía.
Sokolovsky también fue hallado culpable de «tráfico ilegal de un equipo tecnológico especial», luego de que las autoridades encontraran un lapicero con una cámara incorporada durante un allanamiento a su vivienda.
El joven se mostró aliviado tras el veredicto, por el hecho de que le dieron una pena de cárcel en suspenso y afirmó que “sin el apoyo de la prensa, me hubieran recluido de verdad en una prisión.
Con información de BBC