El Gobierno de Brasil declarará situación de emergencia social en su estado de Roraima, en la frontera norte del país, para aumentar el financiamiento y los soldados en el lugar y así ayudar a controlar el flujo de refugiados venezolanos, dijo el miércoles el ministro de Defensa, Raúl Jungmann.
Miles de venezolanos que escapan de la crisis económica en el país han cruzado la frontera hacia Brasil en los últimos meses. El gobierno local aseguró que el masivo ingreso de inmigrantes representa el 10 por ciento de la población de Boa Vista, la capital de Roraima, o alrededor de 40.000 personas, lo que complica los servicios públicos.
Según Jungmann, las Fuerzas Armadas duplicarán el número de militares apostados en el estado, establecerán un hospital de campaña y crearán un centro de control para fortalecer las fronteras.
El presidente brasileño, Michel Temer, viajó el lunes a Boa Vista para reunirse con las autoridades locales y evaluar la situación.
Con información de 2001