Este miércoles a la orilla de la playa de Ipanema, en Río de Janeiro, apareció muerta una ballena de 30 toneladas. Según aseguró el Centro de Operaciones Río (COR), el animal tenía la mandíbula separada del cuerpo.
La presencia del animal despertó la curiosidad de centenares de bañistas que estaban en la playa aprovechando que es día festivo en Brasil y el buen tiempo que había durante la mañana en la ciudad.
El biólogo Rafael Carvalho, aseguró que el animal “está en un estado de descomposición bien avanzado. Por la apariencia, sin piel, hinchado, puede ser que esté muerta desde hace una semana o más”.
Cerca de un centenar de ballenas, principalmente de la especie yubarta, encallaron este año en diferentes playas de Brasil, el mayor número para el período desde que los casos comenzaron a ser contabilizados en 2002.
Ese aumento es atribuido al crecimiento de la población de ballenas en aguas brasileñas y a una disminución de krill, los pequeños crustáceos de los que se alimentan.
Con información de Noticias24