Con una goleada imponente, Carabobo Fútbol Club arrolló 0-3 a Deportivo Lara, ejecutando una estocada que terminó con el invicto de nueve partidos de los crepusculares, por la Jornada 10, del Torneo Clausura 2017, encuentro disputado este sábado en el estadio Metropolitano de Cabudare.
Después del acostumbrado minuto de silencio realizado en nuestro balompié, el colegiado portugueseño, Ramón Ortega, puso a rodar la esférica en el césped del estadio larense, para que Carabobo y Lara lucharan en busca de la ansiada victoria.
En los primeros compases del partido ambas escuadras buscaban con diferentes propuestas la ventaja en el marcador, los valencianos dominaron la esférica, sin embargo los locales sorprendían al contraataque exigiendo al zaguero Alejandro Fuenmayor, quien atento a los embates cortó cualquier oportunidad de peligro.
En el minuto 43 tras un cambio de frente por parte de Carlos “Mono” Suárez, el portador del dorsal 3, aprovecharía los espacios para incursionar con derecha y dejarle en bandeja de plata el gol al “Killer” colombiano, Tommy Tobar, que no titubeo para anotar el 0-1 del marcador, llegando a 16 tantos en la temporada y de esta forma los granates se fueron al descanso cortándole al rival la racha de 458 minutos sin recibir goles.
En la fracción 61, el cuerpo técnico industrial les daba ingreso a dos habituales que en esta oportunidad ingresaron el partido desde el banco de suplentes, Cristian “Chispa” Novoa y Marlon “Meñique” Fernández, para revolucionar aún más el enfrentamiento favorable para los carabobeños.
Asimismo, siete minutos después la “Chispa” granate no tardó en hacer su primera descarga, cuando tras insistir en el área rival logró hacerse con la caprichosa y definir sin oposición dejándola rodando en la alfombra roja con destino a gol, ampliando así la ventaja en la pizarra, anotándole a los rojinegros en 68 minutos, la misma cantidad de goles recibidos en las nueve jornadas anteriores.
Ante las constantes llegadas del elenco granate, el juvenil rojinegro Ignacio Anzola, tocó la pelota con la mano en su propia área, para impedir una oportunidad clara de gol al 75’, por lo que el principal Ortega, decretó la pena máxima favorable para la visita. El encargado de convertir y sentenciar la goleada, fue el delantero y también goleador del partido, Cristian “Chispa” Novoa, quién definió de forma certera y anotó así el gol número 800 de Carabobo FC, desde su fundación en 1997.
De esta forma, la máquina granate sigue demostrando tanto en números como en juego, que es el mejor equipo de la temporada 2017, liderando la mayoría de los renglones ofensivos y defensivos de la liga. Con el objetivo cumplido, Carabobo Fútbol Club culmina su pequeña gira por tierras larenses con un saldo más que positivo y se enfoca en lo que será su siguiente rival, Zulia Fútbol Club por la Jornada 11 del Torneo Clausura 2017.
Con información de prensa Carabobo FC