Héctor Gil Linarez y Héctor Gil Pérez, padre e hijo respectivamente, fueron condenados por ser los responsables de la muerte de una mascota comunitaria, hecho acaecido en junio de 2023, en un estacionamiento de La Candelaria, Caracas.
Ambos admitieron los hechos ante el tribunal 1ero de Control del Área Metropolitana de Caracas, y se les fijó una condena.
Vale destacar que es la primera vez que la justicia venezolana impone una sentencia penal corporal contra agresores de animales.
Gil Pérez pagará una condena de 4 años y 18 días de prisión, y también deberá pagar 50 unidades tributarias. Mientras que su padre, Gil Linarez, fue condenado a 2 años, 18 días de cárcel y el pago de 50 unidades tributarias.
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«Fueron admitidos los delitos de agavillamiento, uso indebido de arma de fuego, maltrato y muerte animal (…) El juez escuchó todos los argumentos y admitió todas las solicitudes del fiscal del Ministerio Público (…) Corresponde ahora pasar el caso a un tribunal de de ejecuciones que hará cumplir lo que establece la ley respecto a los requisitos formales», explicó la abogada Silvia Fernández, quien llevó el caso.
Caso del perro Gol
El animal, que tenía por nombre Gol,
Envenenó a diez perros y quedó detenido por maltrato animal
murió a causa de dos balazos con un arma de fuego tipo escopeta, en manos de los sujetos, en el área de estacionamiento del edificio Puente Anauco, ubicado en la Candelaria, municipio Libertador de Caracas. Luego, lo golpearon con un tubo y abandonaron el cuerpo en una alcantarilla.
Las investigaciones de este caso estuvieron a cargo de la Fiscalía 87 Nacional Ambiental del Ministerio Público.
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