Corea del Norte pidió al resto de Estados miembros de la Organización de Naciones Unidas (ONU) que no apliquen las sanciones en su contra impuestas por el Consejo de Seguridad y criticó los esfuerzos de Estados Unidos para lograr una implementación más estricta de esos castigos.
La representación de Pyongyang ante Naciones Unidas distribuyó una carta enviada este jueves al resto de embajadas, en la que les solicita que «reconsideren cualquiera de sus actividades de implementación hasta que se aclare la legalidad» de esas sanciones, explicó la agencia Efe.
El Consejo de Seguridad tiene en vigor desde hace años importantes castigos diplomáticos y económicos contra el país asiático por su programa nuclear, que se han ido endureciendo progresivamente en respuesta a los ensayos atómicos y de misiles de Pyongyang.
En los últimos meses, Estados Unidos ha insistido repetidamente a otros países en la necesidad de aplicar completamente esas sanciones para elevar la presión sobre el régimen de Kim Jong-un.
En un comunicado, la representación de Pyongyang ante la ONU acusó hoy a Washington de tratar de «intimidar» a otros para que sean más duros en la aplicación y subrayó que, si no todos lo hacen, es porque no consideran que los castigos sean razonables.
Corea del Norte insiste, entre otras cosas, que las sanciones no tienen una base legal adecuada y que son un pretexto para actuar contra el país.
El mes pasado, el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, insistió al Consejo de Seguridad sobre la necesidad de aumentar la presión sobre Corea del Norte para forzar al país a abandonar su programa nuclear.
Tillerson subrayó que Washington está dispuesto a sancionar a entidades e individuos de terceros países que apoyen las «actividades ilegales» de Pyongyang.
Con información de El Universal