(Valencia, 14 de noviembre. Noticias24 Carabobo) Cuba, que enfrenta un acelerado envejecimiento de su población, está tratando de incrementar la insuficiente cantidad y calidad de las instituciones especializadas para acoger ancianos, reveló el jueves un funcionario del gobierno.
«El envejecimiento poblacional es un fenómeno ya en curso y hacerle frente es una necesidad del país, de ahí que se implementen estrategias de inmediato, a fin de garantizar una infraestructura suficiente y mayor calidad de vida a los ancianos», dijo Alberto Fernández, jefe del Departamento de Adulto Mayor del ministerio de Salud.
A la par, «la sociedad debe ganar en cultura gerontológica, o lo que es lo mismo, aprender a convivir en armonía y salud con los ancianos», declaró Fernández al diario oficial Granma.
Con una población de 11,1 millones de habitantes, la isla tiene 2,4 millones de personas mayores de 60 años (18,3%), una esperanza de vida de 76 años, una baja natalidad y altas cifras de emigración, en especial de adultos jóvenes.
La cantidad de personas mayores de 60 años es igual a la de los niños (hasta 14 años) y en adelante será superior.
«Somos el primer país en América Latina donde ocurre, a lo que se suma que tampoco contamos con reemplazo poblacional, es decir, garantizar que cada mujer tenga una hija», destacó Fernández.
La isla cuenta con 230 «casas de abuelos» para atención diurna, con capacidad para 7.398 ancianos, pero se estima son 20.144 los que requieren este servicio, explicó el funcionario.
También existen 127 hogares donde viven ancianos, con 9.287 camas, cifra que resulta insuficiente.
«El 20% de los adultos mayores se considera que pueden ser frágiles o en estado de necesidad», dijo Fernández.
«Estamos trabajando en la recuperación de camas desactivadas en hogares de ancianos por problemas constructivos, para llevar al máximo la capacidad de ingreso; y está propuesto incrementar en 13 la cifra de hogares, en el periodo del 2013 al 2015″, agregó.
Igualmente, «se prioriza la reparación de las casas de abuelos (que se incrementarán a 140 en 2015) y la implementación de casas para ancianos con discapacidad, dependiendo del comportamiento del envejecimiento en cada territorio» de la isla, añadió.
Más grave aún es el caso de ancianos discapacitados, con demencia senil o mal de Alzheimer (unos 130.000 casos), para los cuales aún no hay instituciones preparadas para acogerlos, señaló.