El fervor religioso que identifica a los guacareños quedó demostrado una vez más en la procesión de El Nazareno, imagen que toca lo más profundo de la fe de quienes, en profunda unión fraternal, año tras año acuden a la perenigración para revivir el día en que Jesucristo, antes de entregar su vida por los pecadores, experimentó distintas etapas con sus seguidores, como la aprehensión, flagelación, coronación de espinas y crucifixión.
El significado de “El Nazareno”, se ha hecho una tradición muy arraigada en el pueblo de Dios, y especialmente en Guacara; actividad en la que alcalde Gerardo Sánchez participó -junto a los feligreses y como en años anteriores- y convencido de su fe, acompañó la pasión de Jesucristo.
Durante la sagrada eucaristía, efectuada en los alrededores de la Plaza Bolívar de la ciudad, el párroco Oscar Martínez destacó los hechos ocurridos el Miércoles Santo, como la preparación de la última cena de Jesús con sus apóstoles y la traición de Judas Iscariote al entregar al hijo de Dios por treinta monedas de plata.
Asimismo, durante la homilía el religioso insistió en que cada quien debe tomar su madero de tormento, junto al Nazareno, y enfrentar las vicisitudes que se le puedan presentar en la vida, animando al débil y brindándole una mano amiga al necesitado para ayudarlos a enfrentar su derrotero.
“Dios bendiga año tras año a quienes vienen a postrarse y llevan su cruz hasta el final de sus vidas. Pido a todos que se abracen como hermanos y que ayuden a su prójimo a ser fuertes y soportar hasta el final”, imploró el prelado, al tiempo que extendió bendiciones para el municipio, la población y para el alcalde Gerardo Sánchez, “para quien pido una bendición especial y que el Todopoderoso le permita seguir llevando con éxito las riendas de esta ciudad que lo vio nacer”.
Efectiva promesas
Una muy arraigada costumbre de los guacareños que asisten a la procesión de El Nazareno es su indumentaria color morado, la cual simboliza el tributo por los milagros recibidos. Otros asisten para hacer sus peticiones por la salud y unión de las familias, siendo éste el caso de Carmen Arévalo, quien indicó: “tengo varios años participando en este importante momento de fe para nosotros como católicos, en los cuales pido por la paz y tranquilidad del mundo entero, así como de mi país, de mi familia. Es un momento especial en mi vida”.
Por otra parte, Marcela Castillo dijo, “como fiel devota guacareña, tengo seis años acompañando a la imagen del Nazareno, a la cual le debo la salud de mi hijo, ya que durante el principio de mi embarazo me vi un poco mal y se lo encomendé con mucha fe; hoy tengo un hijo sano y hermoso”, exclamó.
Para Gabriel Vargas, es “un momento único el cual comparto junto a mi esposa e hijas desde hace cuatro años, cuando le pedí al Nazareno con fervor que nos diera su bendición con hijos, ya que mi esposa no lograba quedar embarazada y hoy día tenemos dos hijas; aun me quedan tres años para culminar mi promesa y luego quiero ser voluntario para cargar la imagen”, enfatizó.
Finalmente, Lorenis González manifestó sentirse agradecida con el Nazareno por la vida y salud de su padre, quien estuvo convaleciente durante un tiempo, “él se enfrentó a una enfermedad muy fuerte y la angustia se apoderó de nosotros y mi único refugio fue la santa imagen, a quien le pedí con fe y entrega y hoy día mi papá está sano y feliz”.
Con información de prensa Alcaldía de Guacara
