Las presencias que desaparecen en el Metro de Caracas forman parte de las múltiples leyendas del subterráneo capitalino. Hay personas que destacan que estas las han visto de día como en horas de la noche y la madrugada.
Era en horas de la tarde, el Metro estaba algo vacío por lo que le llamó la atención. Pensó que el viaje sería igual de rápido en el transporte masivo. Mientras pensaba en lo que podría hacer el resto de la tarde.
La mujer destaca en la estación Plaza Venezuela estaba esperando en la cola para comprar el boleto. Pero un señor delante de ella vio que este tenía los ojos muy abiertos, lo que le llamó la atención.
Esta pensó que era una persona con un problema visual, de hecho empezó a sentirse intranquila en ese momento. Le llamó la atención que si era una persona con una discapacidad, ¿por qué estaba solo?.
Pensó que lo mejor sería era ayudarlo pero este se adelantó en la cola. La dama pensaba como había llegado hasta el tren. Este se sentó en la fila de asientos y se quedó por unos segundos con los brazos cruzados.
Presencias que desaparecen en el Metro de Caracas
El tren empezó el recorrido, cuando vio que este se levantó del asiento y empezó a caminar tranquilamente. Sintió miedo, pero dice que vio como el hombre se paró, además de caminar desapareció en segundos.
En aquel pasillo que rara vez estaba vacío y que aquella tarde marcaría para ella una de las experiencias más escalofriantes que hay. Además de ese hombre hay muchas otras historias sorprendentes.
Historias que se han convertido en leyendas en el Metro de Caracas, donde muchas personas tienen anécdotas e historias asombrosas que han visto.
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