Rusia notificó que enviará un mono a Marte en su próxima expedición al planeta rojo, aunque la prioridad del programa especial ruso es conquistar la Luna a principios de la próxima década.
«Prepararemos un macaco para viajar a Marte. Pero, por el momento, la simulación tendrá lugar en la Tierra», dijo Serguéi Orlov, director del Instituto Médico de Primatología, con sede en Sochi (mar Negro), a la agencia Interfax.
Orlov aseguró que el simio tendrá que someterse a pruebas de ingravidez y radiación cósmica en el Centro de Física Nuclear de Dubná, en la región de Moscú.
Enfatizó que su instituto ha recibido una beca del Estado para conducir experimentos con macacos, cuando los científicos rusos parecían haber descartado hace años los viajes espaciales con animales de tamaño grande o medio, como monos o perros.
Las naves rusas en los últimos años únicamente han transportado ratones, ya que su genoma es muy similar al del ser humano, según los expertos.
El primer ser vivo en viajar al espacio fue la perra Laika, que en 1957 se convirtió en precursora de los vuelos tripulados por astronautas, aunque falleció en el intento. Tuvieron más suerte las perras Belka y Strelka, que regresaron sanas y salvas a la Tierra tras dar 17 vueltos alrededor de nuestro planeta abordo del Sputnik-5.
A través de la historia, el programa espacial soviético y ruso envió a una docena de simios al cosmos, los primeros de ellos Abrek y Bion en 1983, costumbre que se suspendió en 1996.
Con información de Globovisión