Tras permanecer más de una semana hospitalizada, falleció la mañana de este lunes en Valencia la poetisa Ana Enriqueta Terán.
Terán nación en Valera, estado Trujillo el 4 de mayo de 1918, fue poetisa y diplomática venezolana. Según reseña una nota de prensa del Ministerio para la Cultura, sus principales influencias han sido los clásicos españoles como Góngora y Garcilaso de la Vega, y más tarde la poesía francesa de Rimbaud y Baudelaire. Pertenece a la Generación del 18.
Su obra poética trasciende lo meramente métrico, y se constituye en una voz propia seducida por elementos que bordean la nostalgia, el amor, la sensualidad y el paisajismo andino. Realizó carrera diplomática en Uruguay (1946) y Argentina (1950).
En 1989 fue galardonada con el Premio Nacional de Literatura, ese mismo año recibió un doctorado honoris causa de la Universidad de Carabobo.
Su casa en el pueblo de Jajó (estado Trujillo), donde vivió durante 11 años, actualmente es el centro cultural Casa de Hablas justamente en honor a la obra homónima de la sonetista. El centro funciona como museo histórico, dada sus características arquitectónicas coloniales, y el significado que guarda para la población el hecho de que la poetisa la haya tomado como inspiración en varios de sus libros.
En uno de sus salones Terán tuvo un taller de alta costura, donde ella misma formó a muchas mujeres de la comunidad en la confección textil. Por su parte, las autoridades municipales de su ciudad natal acordaron bautizar un teatro y una sala de conciertos con el nombre de la poetisa.