Los funcionarios a cargo del orden público deben recordar que está prohibido disparar bombas lacrimógenas con escopetas de forma directa al cuerpo de los ciudadanos, aseguró la fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, durante una rueda de prensa.
Indicó que al ejecutar esta acción se desprenden partículas de plomo y que existen instrucciones claras del uso de este gas en los estándares nacionales e internacionales.
La fiscal exhortó a los funcionarios con responsabilidades de mando en los cuerpos de seguridad del Estado que controlen las actuaciones del personal que tienen bajo su mando y que garanticen la preparación adecuada para realizar esa función, además de las competencias y de la actitud mental y física, para el manejo de herramientas de contención de los eventos violentos en caso de producirse y evitar así el uso de la fuerza.
Hay 500 lesionados por derechos fundamentales y que más de la mitad de las personas afectadas son producto del uso inadecuado de la fuerza de funcionarios del Estado, aseguró Ortega Díaz.
Agregó que “es responsabilidad del Estado garantizar la actuación adecuada de los funcionarios”, en este sentido, pidió que estos tengan solo ocho horas de trabajo y reciban los alimentos para evitar el estrés ante el exceso de guardias por las condiciones violentas que pueden enfrentar.
Con información de Notitarde