Tío Simón cumple cuatro años de su vuelo a llevar tonadas al cielo, como hizo en la tierra y la canción llanera más icónica de Venezuela “Caballo viejo”.
Simón Narciso Díaz Márquez era su nombre completo, nació el día 8 del mes 8 de 1928, en los llanos de Barbacoas del estado Aragua. Sus padres fueron Juan Díaz y María Marquez de Díaz, según Primicias.
Este 19 de febrero se cumple 4 años sin Simón Díaz, pero su legado sigue vigente en los venezolanos. Sus canciones: un nexo que nos recuerda que somos hijos de esta tierra y que somos hermanos.
Trabajador desde la infancia, a la edad de 12 años tras la muerte de su padre, junto a su madre tuvo que hacerse cargo de 7 hermanos.
Antes de morir, su padre le enseñó lo que sabía ya que era músico también, y lo incitó a educarse más en este instrumento que tiempo después fue de sus más grandes armas y acompañantes musicales: el cuatro.
Sin su padre a cargo debió tomar decisiones por el bienestar de toda la familia, es allí que emprende viaje a su nuevo hogar, San Juan de los Morros. Allí culmina la primaria y es instruido formalmente en el ámbito musical.
Tiempo después, en aras del bienestar de su familia, se trasladan a Caracas, donde empieza trabajando de cobrador en un banco, luego empieza a incursionar más a fondo en su carrera, decide tomar clases piano.
Cada vez adquiere más conocimientos y logra tener un programa en radio titulado El llanero, en esta evidencia más su talento, y llama la atención cantando canciones propias. En el programa también incluye la comedia, otro de sus atributos.
Tío Simón fue un artista integral, ligeramente podía causar gracia y risas; tenía una voz potente, distintísima a cualquiera, adiestrado para los instrumentos como nadie, dibujante de caricaturas, y muchas otras virtudes que cualquiera podía percibir.
En 1961 decide unirse a Betty García Urbano, cumpliendo el juramento que la mayoría repite, pero que pocos cumplen “Hasta que la muerte nos separe”. Junto a ella, trajo al mundo sus tres hijos, Bettsymar, Simón y Juan Bautista.
Bolero, gaita zuliana, joropo, pasaje y tonada son los géneros en los que se desempeñó Díaz con un timbre de voz tenor.