«300 Bs. al subir», éste es el emblema que se puede observar desde el pasado lunes en la mayoría de las unidades de transporte público que prestan su servicio en los municipios Valencia, San Diego y Naguanagua, donde el pasaje sufrió un aumento del 100% de manera arbitraria, considerando que no ha sido autorizado por la Alcaldía de Valencia y que muchas unidades aún mantienen el tarifario que indica el valor real de Bs. 150.
Esta situación ha causado un malestar general en los usuarios, considerando que son muchos los que utilizan más de una camioneta diaria para dirigirse a sus puestos de trabajo.
Debido a la gran cantidad de denuncias recibidas ante esta redacción, se llevó a cabo un recorrido la mañana de este martes por diferentes paradas de la ciudad de Valencia, constatando que la mayoría de los transportistas están cobrando 300 Bs., valor que debe ser cancelado por el usuario al momento de abordar la unidad o de lo contrario no podrá gozar del servicio, según señalaron varios ciudadanos al ser entrevistados.
Rosalinda Peroza, quien debe agarrar dos busetas diarias para ir a su lugar de trabajo y luego otras dos para regresar a su hogar, señaló que «es un aumento ilegal y desconsiderado porque en mi caso se me irá el sueldo solo en pasaje».
«O pagas o pagas porque de lo contrario no podemos montarnos en las camionetas, o sea que es a juro la cosa. ¿Dónde están las autoridades, quién les hace cumplir las leyes?», se preguntaba Emmanuel Tovar.
Durante el recorrido se pudo evidenciar que esta nueva tarifa ha sido ajustada tanto en las rutas urbanas como en las suburbanas.
Con información de Notitarde