El juez federal argentino Claudio Bonadio ha procesado y pedido el desafuero para detener a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, en el marco de la causa que investiga el presunto encubrimiento de los iraníes acusados del atentado a la AMIA.
Según la información disponible, la medida contra la exmandataria y actual senadora responde a que por sus contactos «puede entorpecer la causa». Además, tal como destacó Clarín, se la acusa de «encubrimiento agravado» y haber participado de un «plan criminal orquestado». Todo en el marco del supuesto delito de «traición a la patria».
El juez también ha solicitado la detención del excanciller Héctor Timerman, aunque por su delicado estado de salud, en su caso, se solicitó la prisión domiciliaria. La madrugada de este jueves ya han sido detenidos el exsecretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini, y el dirigente social Luis D’Elía. Otro de los detenidos ha sido el referente de la comunidad islámica en Argentina Jorge ‘Yussuf’ Khalil. Además dictó el procesamiento sin prisión preventiva del exsecretario General de la Presidencia Oscar Parrilli y del diputado Andrés Larroque.
Denuncia de persecución
En octubre pasado, Kirchner culpó al Gobierno de llevar adelante una persecución política contra la oposición. «Es un gran disparate jurídico», dijo la senadora por la provincia de Buenos Aires. «Creo que lo más importante que tengo para decirles es que la única traición a la patria es utilizar a un Poder Judicial para perseguir a los opositores», agregó.
«Quieren un Parlamento sumiso, quieren que voten los que ellos quieren. Pero conmigo no lo van a lograr», señaló la exmandataria, agregando que «el objetivo de la persecución es atemorizar a los dirigentes de la oposición para hacerla callar».
Memorándum de entendimiento con Irán
La causa judicial gira en torno a la denuncia que hizo el fiscal Alberto Nisman en enero del 2015, donde acusaba a altos funcionarios estatales incluida Kirchner de haber negociado el memorándum de entendimiento con Irán de forma secreta.
Según los argumentos gubernamentales, el acuerdo bilateral pretendía acelerar las investigaciones sobre la presunta vinculación de ciudadanos iraníes en el atentado a la AMIA de Buenos Aires, que se produjo en 1994 y causó 85 muertos. Fue firmado, tal como recordó Página/12, por Timerman y Ali Akbar Salehi, el canciller iraní. El Congreso argentino lo ratificó pero el Parlamento del país asiático no dio su visto bueno por lo que el pacto se cayó.
Con información de Actualidad RT