El examen de sangre prenatal no invasivo, permite identificar en las primeras etapas del embarazo y con una precisión del 99% si un feto desarrollará el síndrome de Down, reveló la BBC.
Uno de los aspectos más importantes de esta prueba, que ya está disponible en más de 100 países del mundo, es que no genera riesgos de que las mujeres encintas sufran abortos espontáneos, al contrario que otras prácticas más invasivas, como la amniocentesis y la biopsia de vellosidad coriónica, que requieren el uso de una aguja para tomar muestras del fluido amniótico que envuelve al bebé o células de la placenta.
A pesar de que este avance podría hacer desaparecer este trastorno genético, ha despertado cierta controversia porque podría provocar que se practicasen muchos más abortos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que uno de cada mil bebés del mundo nace con síndrome de Down, una condición provocada por la duplicidad total o parcial del cromosoma 21. Esta alteración génica provoca que la persona presente dificultades físicas y psíquicas, además de tendencia a padecer ciertas enfermedades.
Con información de Actualidad de RT