El expresidente de Francia, Nicolas Sarkozy, irá a juicio junto a los otros trece implicados en la investigación sobre los gastos de su campaña electoral en 2012 y las facturas falsas emitidas por la firma Bygmalion.
El juez encargado del caso, Serge Tournaire, ordenó retomar el proceso, en el que se le acusa de haber sobrepasado deliberadamente el límite de gastos fijado en 22,5 millones de euros.
Entre el resto de imputados, además del expresidente, figuran antiguos altos cargos del Unión por un Movimiento Popular (UMP), el antiguo partido de Sarkozy, y su jefe de campaña, Guillaume Lambert, y responsables de la empresa de comunicación Bygmalion, una de cuyas filiales organizaba los actos de campaña.
Todos ellos son sospechosos de haber participado en la creación de un sistema de facturas falsas para atribuir a la UMP unos 15 millones de euros de gastos de mítines que deberían haber figurado en el presupuesto de la campaña presidencial del entonces presidente, que buscaba su reelección.
Con información de ABC