La Organización de las Naciones Unidas (ONU), informó este martes que un aproximado de dos mil desplazados murieron en el mar Mediterráneo en el primer semestre de 2017.
La ONU exhortó a los países a ofrecer vías legales para que sus habitantes lleguen al país de destino, así como también a mejorar la seguridad de las rutas migratorias, ya que los inmigrantes y refugiados salen de sus países (la mayoría en conflictos bélicos) para buscar un lugar seguro donde hacer vida, pero las rutas migratorias son inseguras.
Según los datos que manejan la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, ha disminuido la cifra víctimas mortales en comparación con los primeros seis meses del pasado año, donde se registraron 2.911 fallecidos, pero las cifras siguen siendo alarmantes, en el primer semestre del 2017 van un aproximado de 1.985 víctimas en el trayecto del Mediterráneo, contando los tres naufragios ocurridos en los últimos días.
Por su parte el portavoz de la OIM en Ginebra, Joel Millman informó durante los últimos cuatro años las cifras de decesos han superado las 2.000 personas.
Cécile Poully, portavoz de Acnur que «con tantas vidas en peligro, pedimos que se mejoren las operaciones de rescate y que se apueste por crear alternativas viables y seguras a la migración ilegal para ayudar a todos aquellos que necesitan protección internacional».
Poully también hizo un llamado a la comunidad internacional para resolver los conflictos que obligan a los migrantes a dejar sus países en busca de una mejor calidad de vida en Europa.
Con información de Telesur
