Para ello, debe ser leída en el plenario del cuerpo legislativo la denuncia completa realizada por el exprocurador general Rodrigo Janot, donde acusa al mandatario brasileño de delitos de corrupción y de obstrucción de la justicia, reseñó Nodal.am.
La Procuraduría lo señaló como miembro de una “organización delictiva” que recaudó unos 175 millones de dólares de sobornos en el marco de la causa Lava Jato.
Para que esa lectura se realice es preciso que estén presentes en el recinto apenas 51 de los 513 parlamentarios de la Cámara Baja.
Ni el viernes, ni este lunes, se consiguió ese número. Se aguarda en tanto que pueda verificarse este martes; a menos que, como muchos temen, se trate de una estrategia para dilatar cualquier resolución.
Ocurre que si los legisladores aceptan las acusaciones y permiten la investigación, Temer tendría que dejar el gobierno inmediatamente y dar ese puesto al actual jefe de Diputados, Rodrigo Maia.
La denuncia fue girada por la Corte Suprema al Parlamento el jueves pasado y ya está en condiciones de ser tratada por éste. “Queda una pregunta: si tuvieran prisa por enterrar esta nueva acusación ¿por qué los oficialistas no se movilizan para dar quórum? La impresión que se tiene es que todo esto forma parte del juego.
«La dilación es una señal de que buscarán regatear ese apoyo al gobierno con precios bien alto, para lo que se precisa algún tiempo”, declaró el diputado Chico Alencar del Partido Socialismo y Libertad (PSOL).
Para muchos sectores políticos, inclusive aliados del gobierno, es difícil sin embargo que Temer resista la segunda andanada.
Con información de AVN