Este miércoles, el Fiscal General de la República, Tarek William Saab, reveló detalles sobre el caso de la desaparición de Carlos Lanz.
«Se trata de una trama espeluznante que es como un cóctel del terror, que mezcla múltiples móviles criminales«; dijo desde la sede del Ministerio Público en Caracas.
En este sentido, explicó que su esposa Maxiorisol Cumare pagó 8 mil dólares a unos sicarios para ejecutar el crimen.
Muerte de Carlos Lanz
El 8 de agosto de 2020, Lanz salió de su casa, ubicada en Maracay, estado Aragua, sin dejar indicación sobre a dónde se dirigía.
Al momento del trágico hecho, Carlos Lanz tenía 74 años de edad.
Las experticias del caso determinaron que no hubo acto de violencia al momento de su desaparición.
«Lo que teníamos corroborado es que, a partir de las 8:30 a.m.; Carlos Lanz salió de su casa. Sin embargo hay una laguna de tiempo en la que ninguno de los entrevistados del momento supo contestar adecuadamente», manifestó el Fiscal de Venezuela.
Saab explicó que Lanz no salía con cualquier persona de su casa, tenía que ser una persona de su confianza. En este caso Tito Viloria, quien valiéndose de su amistad con él lo invitó a una reunión con milicianos en Mariara.
Tarek William Saab y el caso de Carlos Lanz
Durante la investigación, se logró ubicar a Maryuri Acevedo, trabajadora doméstica de Carlos Lanz, quien añadió nueva información valiosa para esclarecer los hechos.
Esta ciudadana reportó una relación de hostilidad entre Carlos Lanz y su esposa Maxiorisol Cumare; e identificó a 2 parejas extramatrimoniales de ella; de nombres Oliver Medina y Glenn Castellanos; razón por lo que se realizó un exhaustivo análisis telefónico.
Se logró ubicar y entrevistar a Oliver Medina, quien afirma que para el momento de los hechos mantenía una relación sentimental con Maxiorisol Cumare.
Tras estas revelaciones se ubicó a Glenn Castellanos (pareja extramarital de Maxiorisol Cumare); quien tras ser interrogado aporta la información que dio el giro definitivo a la investigación.
Este ciudadano admitió que participó en el asesinato de Carlos Lanz, por mandato de Maxiorisol.
Castellanos afirmó que 3 meses antes del hecho, Cumare le encomendó desaparecer a Carlos Lanz; para lo que le aportó un pago de 8 mil dólares, con el objetivo de neutralizar a su esposo.
La mujer especificó que el cadáver nunca debía encontrarse. Esto implica que no lo encuentren enterrado ni en la quebrada de un río o dentro de una finca o cementerio.
Castellanos dijo que Cumare ya estaba harta de que Lanz fuese un obstáculo para sus negocios de corrupción con distintos proveedores.
«Tras la delación de Castellanos, él nos llevó hasta la finca La Fortaleza, en Cojedes, siendo acompañado por un equipo de expertos forenses y un grupo de caninos con preparación especial para la ubicación de cadáveres, lo cual arrojó los siguientes hallazgos», contó el titular del Ministerio Público.
Finalmente, se identificó al capataz de la finca, Helis Becerra; de presunta nacionalidad colombiana. La delación lo identifica como una persona peligrosa.
En presencia de Tito Viloria, Helis Becerra y Glenn Castellanos, le propinan dos disparos en la cabeza y lo lanzan a una fosa cavada por el capataz el día anterior.
Luego deciden no dejarlo en la fosa, sino ubicar al cadáver en una cama de plástico y lo llevan hasta una cochinera; donde fue desmembrado y arrojado a nueve cerdos (método utilizado por paramilitares colombianos).
Textualmente Glenn Castellanos señala que utilizaron machetes y un cuchillo. Los miembros, tronco y cabeza fueron lanzados a una cochinera, donde los cochinos que allí estaban se comieron los restos, según testimonio de Glen Castellanos; quien señala que el objetivo principal de Cumare era desaparecer por completo el cuerpo de Lanz.
«Las investigaciones continúan porque no descarto que hayan nuevos detenidos. En estos momentos tenemos la detención de 13 personas por su vinculación con el secuestro y posterior asesinato de Lanz», enfatizó.
Imputados en este caso
A la vista de toda la información recabada, este miércoles 6 de julio se tramitó por vía de necesidad y urgencia ante el Tribunal 4° de Delitos Vinculados al Terrorismo y Bandas Criminales; las correspondientes órdenes de aprehensión, contra los siguientes ciudadanos:
En el caso de Maxiorisol Cumare (esposa de Lanz y presunta coautora) por la supuesta comisión de sicariato, asociación para delinquir; corrupción y simulación de hecho punible.
A Glenn Castellanos por la presunta comisión de sicariato, asociación para delinquir y simulación de hecho punible.
A Tito Viloria le imputaron por sicariato, asociación para delinquir, concierto para celebración de contratos y simulación de hecho punible.
En relación con Elis Becerra sicariato y asociación para delinquir.
Sobre José Antonio Pinto Moreno y Hely Enrique Pinto Moreno (asesinos) fueron imputados por sicariato y asociación para delinquir.
Con respecto a Zaida Suárez le imputaron por sicariato, asociación para delinquir, concierto para celebración de contrato y simulación de hecho punible
A Darwin Zambrano (pareja de la hijastra), Oliver Medina (amante de la pareja de Lanz) y Maryuri Acevedo (doméstica) fueron imputados por encubrimiento y simulación de hecho punible.
De igual modo, Diego Atehortua (amigo del cuñado) fue imputado por encubrimiento.
Alyeska Berenice Gil Cumare (hijastra) y Abyayala Esperanza Lanz Cumare (hija) fueron imputadas por encubrimiento y simulación de hecho punible.
Por último, Saab resaltó que el Ministerio Público ha recobrado el prestigio que no tenía. «Se convirtió en la institución garante de la acción penal por méritos propios, gracias a la acción de los fiscales», añadió.
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