La ola de conflictos
El 8 de octubre de 2022 se produciría el ataque ucraniano con mayor simbolismo en el conflicto; un misil lanzado por Ucrania impacta en el puente de Crimea, inutilizando varios carriles y provocando desconcierto en Rusia.
Este hecho sería respondido dos día después por el alto mando ruso en un ataque masivo a todo el país.
Ucrania recupera Jersón
Dentro de los territorios recuperados por Ucrania, quizás el más significativo ha sido el de la ciudad de Jersón. Esta localidad fue la única capital de provincia conquistada por Rusia en el transcurso de la invasión.
Además, era una de las cuatro regiones anexionadas a través de los referéndums ilegales realizados a finales de septiembre y ratificados pocos después por la Federación Rusa.
Moscú considera Jersón como parte de su territorio, al mismo nivel que cualquier otra ciudad del país.
Rusia vuelve a avanzar en el Donbás
Poco después de recuperar Jersón, el conflicto volvería a estancar sus frentes y se pasaría a una guerra posicional.
Con la llegada del invierno los avances se ralentizaron y Rusia centraría desde entonces sus esfuerzos en los bombardeos masivos para afectar la infraestructura crítica y militar ucraniana.
Zelenski acentúa su papel diplomático, y el 21 de diciembre viajaría a Estados Unidos, en su primer desplazamiento fuera del país desde el inicio de la invasión.
Además, comenzaría a pedir de manera más insistente los carros de combate Leopard, una discusión que inundaría las agendas de los líderes occidentales y cuya decisión estaba en manos de Alemania.
Guerra en marcha
El Gobierno ucraniano alerta de una nueva ofensiva rusa esta misma semana. «Podemos enfrentarnos a la revancha de Rusia, se habla de una ofensiva en camino. Hay nerviosismo. Algunas partes de Ucrania han estado viviendo así desde 2014. Pero los rusos no son tan poderosos como lo eran hace un año», comentó Zelenski.
Por su parte, el Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha reconocido que «esa nueva ofensiva rusa ha empezado ya».
Este viernes 24 de febrero todas las miradas seguirán puestas en Ucrania. Y ya son 365 días.