Detectives de la policía científica le respiran en el cuello a Héctor Eduardo Sumoza Padrón, un albañil con amplio prontuario policial acusado de aniquilar con una especie de hacha a una familia en Maracay.
Las pesquisas se orientan hacia la búsqueda del múltiple homicida quien el pasado fin de semana ultimó a Nelinyibet Millán Blanco, de 43 años y sus cuatro hijos. La matanza se registró en la casa número 15 del sector Santa Ana, detrás del terminal de pasajeros de Maracay.
Las investigaciones señalan que Padrón sostuvo una pelea con la propietaria de la residencia para que le adelantara el pago de algunos trabajos de albañilería. El criminal insistía en que le cancelara 20 mil bolívares para comprar víveres y un kilo de queso.
Sin embargo, al no concretarse el pago optó por cobrar venganza. El análisis del suceso refiere que el “Monstruo de Santa Ana” usó una herramienta para cortar bloques con la cual le quitó la vida a la infortunada mujer. Luego fue por sus dos pequeñas hijas de dos y nueve años a quienes asesinó también y los despojos los ocultó dentro de unas bolsas de escombros.
Luego acudió a una cancha donde se encontraba el menor de doce años. Bajo un ardid lo engañó. Le indicó que su madre lo llamaba. Al llegar a casa le quitó la vida y por último, para culminar su cruenta obra, aguardó a que llegara un joven de 19 años.
Las autoridades hallaron una carta escrita por el homicida donde indicó los motivos de la masacre y la negativa de la mujer en pagarle adelantado un dinero. En la misiva advierte que podría continuar su estela de crímenes si es acosado por las autoridades. Sumosa Padrón presenta registros policiales por diversos delitos. Es oriundo del estado Varga, de donde huyó por estar involucrado en una denuncia de violencia de género.
Con información de Notitarde
