La revista Frontiers in Human Neuroscience informó que un equipo de investigadores de la Universidad Oberta de Cataluña, España, y del Hospital General de Massachusetts de Boston, Estados Unidos (EE.UU.), analizaron de forma sistemática 116 estudios científicos diferentes con el fin de conocer la influencia de los videojuegos en el comportamiento y el cerebro.
Jugar videojuegos no solo modifica el funcionamiento de nuestro cerebro, sino también su estructura, ya que se dan cambios significativos en muchas regiones de este, según el estudio.
Jugar videojuegos mejora la atención sostenida y la selectiva. Asimismo, el uso de videojuegos aumenta el tamaño del cerebro, así como el desempeño de partes del cerebro responsables de las habilidades visoespeciales, es decir, la capacidad que tienen las personas para representar, analizar y manipular objetos mentales, concluyeron los científicos.
Cuando se trata de videojuegos no todo es positivo, ya que estos pueden presenta síntomas parecidos a los de las personas que son adictas a las apuestas o las compras, fue otros de los hallazgos de la investigación.
Los videojuegos pueden causar la modificación del sistema de recompensa del cerebro que bombea dopamina, hormona responsable del placer, lo que podría desencadenar que los jugadores se conviertan en auténticos adictos.
Con información de Telesur