En uno de los juegos de postemporada más largos en la historia de Grandes Ligas, Guardianes de Cleveland dejaron en el terreno a los Rays de Tampa Bay una carrera por cero, con lo cual avanzaron a la Serie Divisional.
Tras un maratónico encuentro de 15 entradas, Óscar González conectó un cuadrangular solitario frente a Corey Kluber, quien en el pasado comandó la rotación de Cleveland, para desatar la fiesta en el Progressive Field.
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— Cleveland Guardians (@CleGuardians) October 8, 2022
El relevista Sam Hentges se llevó la victoria tras tres entradas completas, en las que permitió tres imparables y abanicó a seis contrarios; dos de ellos consecutivos para cerrar una seria amenaza de Tampa Bay el 15º inning, cuando pusieron corredores en las esquinas y un solo out.
Con 14 entradas, el partido se convirtió en el juego con la mayor cantidad de innings sin permitir carreras en un choque de Play-Off. Ambos equipos se combinaron para permitir solamente 11 imparables, dar 8 boletos y ponchar a 39 bateadores.
Además, se volvió el partido más largo en postemporada desde que, en la Serie Mundial de 2018, Dodgers de los Ángeles derrotaron a Medias Rojas de Boston 3×2 en 18 episodios.
Por Cleveland, Andrés Giménez falló en cinco turnos, ponchándose en cada uno de ellos.
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