(Valencia, 10 de diciembre. AVN) A 30 años de prisión fueron condenados un subteniente y tres sargentos segundo de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), quienes el 16 de junio de 2010 secuestraron a un comerciante en la avenida Los Jabillos, en la urbanización La Florida, parroquia El Recreo, en Caracas.
Una nota de prensa el Ministerio Público reseña que con base en las pruebas presentadas en el debate oral y público, los fiscales de este organismo ratificaron la acusación contra el subteniente Enoc José Hidalgo Arguelles, de 26 años de edad, y los sargentos segundo Miguel Antonio Sánchez Cruz (26), Juan Carlos Pérez Pérez (24) y Oscar Alejandro Zurita Arocha (30), por los delitos de secuestro breve, robo agravado y asociación para delinquir.
En este sentido, el Tribunal 4° de Juicio Itinerante del Área Metropolitana de Caracas, al evaluar las pruebas expuestas por el Ministerio Público, dictó la referida condena contra los cuatro efectivos de la GNB, quienes se encuentran privados de libertad en el Centro de Procesados Militares de Ramo Verde, en el estado Miranda.
El día del hecho, cerca de las 10:00 de la noche, el comerciante dejó su vehículo aparcado en un estacionamiento y se dirigió hacia su residencia.
En ese instante, los captores, quienes se desplazaban en un vehículo, interceptaron al hombre y bajo amenaza de muerte lo introdujeron en el automóvil, donde lo despojaron de un arma de fuego.
Le exigieron la cantidad de 50.000 bolívares para dejarlo libre, pero ante el razonamiento de la víctima de no tener esa suma de dinero sus captores le pidieron 20.000 bolívares. El comerciante insistió en que no tenía suficiente dinero, por lo que los cuatro captores optaron por trasladarlo hasta la avenida Andrés Bello, lugar en el que procedieron a bajarlo del auto.
Cuando lo bajan del auto le disparan a la víctima en dos oportunidades con el arma que le fue robada. Uno de los proyectiles le penetró en una de las piernas. El comerciante se desplomó en la avenida y mientras sus captores huían fue auxiliado y trasladado a una clínica.
Sus familiares hicieron la denuncia ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), por lo que la pistola quedó registrada en los archivos policiales.
Luego, el 14 de julio de 2010, cuando se desplazaban por un sector de Villa de Cura, estado Aragua, los cuatro agresores fueron descubiertos por funcionarios del CICPC, quienes procedieron a revisar el auto donde encontraron el arma despojada al comerciante.
Una vez identificada el arma, se realizó una prueba de reconocimiento en el que la víctima identificó a los cuatro hombres como las personas que lo habían secuestrado.