El “Monstruo de Atizapán” consternó a México tras descubrir miles de huesos enterrados bajo el piso de su casa; en un sótano improvisado, ubicada en Atizapán de Zaragoza.
Aún la población no sale de su asombro, al conocer que fue capturado un hombre de 72 años, apodado como Andrés N, que está relacionado con la desaparición de la esposa de un comandante de la policía.
El pasado 15 de mayo, la Policía halló restos de cuerpos y pruebas suficientes para dar prisión preventiva por los asesinatos de las mujeres en una población de México. Ante los hallazgos, el magistrado del caso fijó un plazo de tres meses para realizar una investigación complementaria sobre los hallazgos en su vivienda.
El hombre era considerado por muchos como una persona “ejemplar”. Nadie sospechaba que se tratara del “Monstruo de Atizapán” y los macabros asesinatos.
“Fue un hombre muy respetado para nosotros. No se supo nada antes de que hiciera algo o que secuestrara o matara; nada hasta hoy. (…) Era un hombre tranquilo por eso nos sorprende a todos”, comentó una vecina al medio Milenio.
Andrés N fue descubierto porque fue vinculado con la desaparición física de la esposa de un comandante de la policía, éste al no saber nadad de su compañera sentimental, decidió investigar para encontrarla.
Todo por Reyna
Reyna conocía a Andrés N, pues era amigo de la familia, y se contactó con él para ayudarlo a hacer unas compras, pero después de ese encuentro no regresó.
Por lo que, el esposo comenzó a indagar qué había sucedido. Primero, llamó a Andrés y preguntó si había visto a su esposa, a lo cual éste le contestó que no. Sin embrago, Bruno, el esposo, reviso las cámaras de seguridad cercana a la vivienda del “Monstruo de Atizapán”, y comprobó que si había asistido a la cita.
Por lo tanto, el comandante acudió a la casa de Andrés acompañado por el hermano de Reyna para confrontarlo. Allí, Andrés, nervioso, permitió que Bruno ingresara a su hogar, diciéndole que no iba a encontrar nada. Y al principio fue así.
Pero, Bruno se comunicó al celular de Reyna y logró escucharlo debajo del suelo, en lo que resultó ser un sótano improvisado con una pequeña entrada. Allí encontró lo que quedaba del cuerpo de su esposa.
Hallazgo de pruebas
Luego de ser detenido, un grupo de forenses acudió a la vivienda y encontró zapatos de mujer, maquillaje, y listas de nombres en la vivienda del hombre de 72 años.
También, hallaron miles de piezas de huesos enterradas bajo el piso de su casa. Se encontraron varias tarjetas de identificación que pertenecían a mujeres que habían sido reportadas como desaparecidas desde hace cinco años.
Por su parte, la fiscal estatal de delitos de género, Dilcya García dijo que “En este momento no podemos decir a cuántas víctimas corresponde lo que estamos encontrando (…) Posiblemente sea un acto feminicida serial”.
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