Cada persona adopta a su estilo de vida distintos hábitos, desde la niñez hasta la vejes, variadas costumbres que pueden parecer inofensivos e incluso adecuados, pero lo cierto es que a menudo caemos en errores que pueden resultar perjudiciales para nuestra salud.
Presta atención a estos hábitos porque, quizá no lo sepas, pero pueden ser los que te están impidiendo encontrarte bien y sentirte pleno.
1. Cerrar la boca y tapar la nariz durante un estornudo
Al hacer este gesto tan común aumentamos fuertemente la presión intracraneal. La circulación cerebral se interrumpe y se comprimen los vasos sanguíneos y los tejidos nerviosos. Esto puede acabar derivando en dolores de cabeza, daños a los vasos sanguíneos e incluso problemas con los oídos.
2. Cuidado con el perfume
El perfume lleva componentes sintéticos que no se conocen con precisión, por lo que lo mejor es optar por determinados productos naturales. Quizá la mejor alternativa para ello sea, de manera indudable, comprar aceites esenciales orgánicos o usar perfume en un espacio bien ventilado.
3. No guardes alimentos en recipientes de plástico
Este tipo de artículos contiene sustancias químicas como ftalatos y bisfenol para que el plástico conserve su flexibilidad, utilizarlo constantemente pueden absorber estas sustancias y afectar la salud y el funcionamiento del sistema endocrino.
4. Cepillarse los dientes después de comer
Por supuesto hay que cepillarse los dientes después de comer, pero no nada más comer. Es mejor que pasen unos treinta minutos tras realizar la comida. ¿El motivo? Hay determinados alimentos y bebidas, sobre todo las ácidas, que afectan el esmalte dental y la capa debajo del esmalte, conocida como dentina. La fricción del cepillo dental empuja el ácido más cerca de la dentina, lo que puede provocar la destrucción del esmalte dental e hipersensibilidad.
5. Usar jabón antibacteriano de manera continuada
En la piel viven muchas bacterias saludables que protegen el organismo. Sin embargo, si usas jabón antibacteriano demasiado seguido, esterilizas sus funciones. Así, tú mismo puedes acabar dando entrada a las bacterias peligrosas, porque algunas tienen inmunidad hacia los componentes desinfectantes.
6. Usar pantalones demasiado apretados
Usar pantalones demasiado apretados puede acabar dañando las terminaciones nerviosas de la piel. Estos problemas en el sistema nervioso acaban provocando una sensación de incomodidad.
Con información de Mejorconsalud