Con gran espíritu de regocijo y agradecimiento por los significativos avances que ha experimentado la localidad en su transformación hacia una gran ciudad, amaneció Guacara y todos sus ciudadanos este soleado lunes 20 de febrero, para conmemorar los 323 años de fundación de una tierra mágica que con orgullo ha cobijado los frutos de sus hijos y visitantes.
Desde tempranas horas, la plaza Bolívar de la localidad fue testigo de un derroche de alegría y un arraigado orgullo, expresado por los ciudadanos que se acercaron a aplaudir los 323 años de su pueblo; en una emotiva festividad que paseó a los asistentes por obras de teatro, bailes y cantos folklóricos; además de un significativo acto de amor y bendición en el que al unísono de una gran familia unida de católicos y cristiano-evangélicos elevaron plegarias a Dios.
Las expresiones artísticas encabezadas en su totalidad por talento local, atraparon la atención de niños, jóvenes y adultos, quienes disfrutaron de la espléndida obra “Erase una vez” con el grupo Fusión V; más de una hora de ritmos musicales propios del gentilicio venezolano con la Fundación Cultural Abolengo y su amplio repertorio de tambores, parrandas, gaitas zulianas, carite guarandol y tambor coreano.
Asimismo los alegóricos bailes de Danzas Amor y Ternura y el sonar de los cueros de la agrupación Renacer y Tambor pusieron a bailar a los presentes; además de muchas otras atracciones infantiles que marcaron la diversión por el Día de Guacara.
Una vez caída la tarde, la agenda planificada por la gestión del alcalde Gerardo Sánchez continuó con un testimonio fiel de la trasformación de un pequeño pueblo en una gran ciudad; los guacareños por segundo año consecutivo se reencontraron y reconciliaron para juntos demostrar la fe de toda una familia por el omnipotente en una única celebración ecuménica.
Durante el acto litúrgico el párroco de la iglesia San Agustín de Hipona, Oscar Martínez inició expresando con “gran alegría” poder compartir gracias a la iniciativa del joven mandatario, para este aniversario, un hermoso encuentro ecuménico, de unión, – destaco- “para dar gracias a Dios por tanta misericordia derramada durante tantos años e implorar una bendición del cielo para las familias, vecinos e instituciones” y con ello seguir construyendo un municipio de bienestar, pujante y solidario.
Resaltó que “es hermoso que en tiempo de tanta división precisamente nos unamos, comprendiendo que estamos cobijado bajo el único manto que Dios ha puesto bajo el cielo por nosotros”, haciendo referencia al emotivo acto de rencuentro.
Por su parte, el pastor Oswaldo Páez de la iglesia cristiana – evangélica “Las Buenas Nuevas”, convencido del poder de la oración como indiscutible acto de renovación de fe y búsqueda de Dios, rememoró el mensaje de esperanza exaltado en el 2016 durante los 322 años de Guacara y confiado en la palabra de Jeremías que decía que: “nuevas son cada mañana las misericordias del Señor y Guacara, la Hermosa Provincia, ha tenido 365 días de nuevas misericordias renovadas por Dios”.
En este sentido, Páez enfatizó en la palabra de Oseas 6:6 en que “Dios quiere que se demuestre amor, que reconozcan el sacrificio de Cristo como único y más que ofrecer sacrificios quemados, lo reconozcan, actúen con misericordia, sean compasivos”; momento para el que pidió abrir los corazones para conocer a Dios y establecer una relación directa y personal con él.
Entregados y sintonizados en un profundo acto de amor y fe, elevaron peticiones para bendecir a la localidad y en un solo sentir expresaron los presentes junto al pastor Oswaldo Páez: “Señor Jesús, a ésta hora te pedimos bendigas a la ciudad de Guacara en sus 323 años, esta ciudad que hemos llamado la hermosa provincia y desde ese momento Dios ha puesto entre sus autoridades hermosearla y lo que ha comenzado en Guacara, seguirá avanzando porque queremos ver cada día una ciudad más hermosa y más sana, porque la presencia de Dios se va a mover sobre ella”.
En la bendición de la memorable fecha, el joven mandatario, resaltó celebrar los 323 años con el deporte, la cultura y la fe en el rescate de los más altos valores y principios; recordó las actividades festejadas a muy tempranas horas en el Parque Municipal Simón Bolívar, en una carrera que reunió a cientos de familias, padres y madres con sus hijos en diferentes categorías, celebrando en esa actividad que los unía, que los entrelazaba y los estrechaba en el aniversario de Guacara.
Posteriormente destacó en la importancia del acto religioso del cual indicó no ha sido realizado jamás en otra parte de la región carabobeña y Guacara por segundo año consecutivo reconoce la fe cristiana de la iglesia evangélica y de la católica y respalda al Papa Francisco de llevar la iglesia a las calles y a las comunidades del pueblo, mientras dijo “hay que reconocer el profundo esfuerzo que también hacen los evangélicos en cada una de las comunidades y cada uno de los espacios por mover la fe en Cristo, siendo ésta la que nos mueve como seres humanos”.
Aprovechó el momento para reconocer a la agrupación parrandera Los Caminantes de Yagua en sus 50 años, “no es cualquier cosa ser una agrupación de parranda del municipio Guacara de la parroquia Yagua; eso enaltece nuestro gentilicio y ese reconocimiento que le damos hoy a ustedes es un reconocimiento a todos los guacareños”.
De igual forma, durante la histórica celebración de los 323 años anunció como regalo que en los próximos 20 días se dará inicio a los trabajos de modernización de la emblemática plaza Bolívar del municipio, siendo éste un importante espacio de reencuentro de todas las generaciones guacareñas.
Seguidas las notas del cumpleaños feliz donde la gran familia guacareña coreó y sopló una vela más por su tierra, cerraron las actividades en compañía de la agrupación Serenata Guayanesa, momento que conmovió y sorprendió para otorgar un broche de oro a estos 323 años que quedarán grabados en la memoria y los corazones de quienes aman a Guacara.
Invitados a gusto y complacidos
La concurrida asistencia de propios y visitantes a celebrar los 323 aniversarios de la ciudad, fueron una indiscutible muestra de amor por Guacara; pintoresca festividad en la que aprovecharon para agradecer los incansables esfuerzos del alcalde Gerardo Sánchez, por enaltecer y retribuirle a la localidad tanta solidaridad.
La Sra. Carolina Cortez, residente de la calle Montilla del casco central, catalogó de excelente la agenda deportiva, religiosa y recreativa pautada para este día; al tiempo que valoró el fomento de la cultura efectuado desde la gestión de Sánchez como pilar importante para la transformación de la sociedad.
“Mi deseo para Guacara es que continúe transformándose en uno de los mejores municipios de Venezuela y para ello invito a todos sus ciudadanos a dar lo mejor de sí, trabajando juntos para seguir mejorando, retomando los espacios, disfrutando a plenitud de todas sus áreas”, destacó.
Mientras que José Sequera, artesano y vecino de la comunidad Ezequiel Zamora de Aragüita, agradeció todas las actividades que a su parecer fueron propicias para festejar con orgullo el cumpleaños de la jurisdicción, en medio de un ambiente de recreación familiar. De igual forma expresó a Dios “interceda y nos favorezca con toda la prosperidad y mejora para cada sector de nuestra Guacara querida; por supuesto con el apoyo y responsabilidad de todos los que aquí vivimos, que sigamos trabajando por ella”
Guacara una tierra de Dios, ha demostrado una vez más durante la celebración de sus 323 años que sólo arraigados en la fe y siempre agradecidos por los designios del Supremo, es posible construir una ciudad de buenos ciudadanos, una ciudad modelo para el país; donde el trabajo incansable, la solidaridad y entrega de su gente son determinantes para continuar un camino de avances y transformaciones.
Con información de prensa Alcaldía de Guacara.
