China lanzó los dos primeros satélites de comunicación para el innovador proyecto de Internet de las Cosas en el espacio. Según las autoridades gubernamentales, los dos satélites ya entraron en su órbita prevista.
Creados por la compañía Xingyun Satellite, los satélites, Xingyun-2 01 y 02, se lanzaron por un cohete portador Kuaizhou-1A desde el Centro de Lanzamiento de Satélites Jiuquan, en el noroeste de China, y ejecutarán pruebas a nivel de tecnología como comunicaciones IoT basadas en el espacio, comunicaciones láser entre satélites y van a probar una plataforma satelital comercial de bajo coste.
El lanzamiento de los satélites, según el Global Times, abre el camino del proyecto de Internet de las Cosas en el espacio de nueva generación en China, de la mano de una red de 80 satélites comunicacionales de órbita baja para el año 2023.
Asimismo, los satélites se usarán para probar aplicaciones en una variedad de campos, como lo es la supervisión inteligente de contenedores; la monitorización ambiental polar, la previsión meteorológica, así como comunicaciones de transporte marítimo; y sentar las bases para la siguiente red IoT basada en el espacio, según señala CASIC, la agencia espacial China.
Una red más efectiva
El Internet de las Cosas trata de la interconexión digital de dispositivos cotidianos con Internet. Actualmente, los servicios de la IoT se ven perjudicados por la poca cobertura de las redes de comunicación celular terrestres, que son efectivas en sólo un 20 por ciento de la superficie terrestre y menos del 5 por ciento en el mar.
De forma curiosa, el Grupo Sanjiang, con sede en Wuhan, reconoció al satélite Xingyun-2 01 con el nombre de Wuhan; con la finalidad de recordar y festejar la reincorporación laboral en la ciudad tras la pandemia. El cuerpo del cohete se pintó con lemas que dicen «Heroico Wuhan, Grande China» y «Tributo a los trabajadores médicos» para hacer honores a la ciudad, a su gente y a todo el personal sanitario que lucharon contra el COVID-19.
La importancia del Internet de las Cosas tendrá grandes proporciones a lo largo de este año 2020; que beneficiaran a la industria farmacéutica y mejoraran las comunicaciones. En especial para conservar la seguridad están originándose nuevos métodos, nuevos instrumentos, que van a formar parte de nuestro día a día.
Por otra parte, en Suramérica, IOTA Latino, la fundación que preside el Ing. Saúl Ameliach, apuesta por un futuro muy novedoso mediante la tecnología DLT IOTA Tangle; principalmente en Venezuela. Generando información y conocimientos a empresas y universidades.