Una tailandesa llamada Kanya Sesser, cambió todos los estándares de belleza y triunfó en el mundo del modelaje por hermosura natural.
Kanya nació sin piernas, y además, fue abandona en un templo budista, ya que al parecer, sus padres no quisieron vivir el reto que esto implicaba.
A la edad de 5 años, fue adoptada por una pareja de estadounidenses y a partir de allí, pudo desarrollar grandes pasiones: el patinaje y el surf.
A pesar de todo lo que tuvo que vivir, esta joven supo canalizar su situación de forma positiva y lejos de sentirse acomplejada, tomó impulso para salir adelante.
Cuando las cámaras en el mundo del modelaje no la tienen ocupada, aprovecha su tiempo para subirse a una patineta de skateboard o a una tabla de surf. Además, espera competir en los Juegos Paralímpicos de Invierno en 2018 en Pyeongchang, Corea del Sur.
Con información de Noticias24