El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, pidió este miércoles que se levante el veto a la participación de Venezuela en la Cumbre de las Américas en abril en Perú y calificó la exclusión de Caracas como un acto de «intolerancia política».
«Nosotros esperamos que se puedan superar esos obstáculos, esos vetos que se le están aplicando a Venezuela al cerrar el espacio para que participe en una mesa, donde van a estar todos los países de nuestra América», exhortó el mandatario nicaragüense durante un acto en Managua.
«Precisamente si hay problema es cuando más hay que llegar a esa mesa, a esos sitios, porque es el lugar que permite hablar de esos temas y buscar solución», subrayó.
El presidente peruano, Pedro Pablo Kuczinsky, retiró la semana pasada la invitación enviada a su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, para que participe en la VIII Cumbre de las Américas que tendrá lugar el 13 y 14 de abril, alegando que Caracas había roto el orden constitucional.
«Ahora han tomado la decisión de excluir a Venezuela de esa reunión, eso no tiene sentido, no tiene lógica y rompe el principio de respeto a la carta de las Naciones Unidas y todas las normas internacionales», cuestionó Ortega.
El mandatario nicaragüense consideró que las cumbres regionales son espacios que permiten «tratar temas que nos puedan distanciar» y que impedir la asistencia de una nación es «retroceder a los tiempos de la intolerancia en términos políticos e ideológicos».
«Esto no es bueno lógicamente para la región, nosotros esperamos que se pueda superar ese veto que se le está haciendo a Venezuela», insistió Ortega, aliado de Caracas desde los tiempos del fallecido presidente Hugo Chávez.
Hasta «las grandes potencias, a pesar de las grandes contradicciones que tienen, sencillamente cuando ellas lo consideran conveniente se reúnen para abordar los temas que las están distanciando», argumentó.
Con información de Panorama