Henry quería ganarse un dinero extra hace una décadas y los pescados del Lago de Valencia eran su invento. El hombre que se crió a orillas del lago en Bucarito en Carlos Arvelo quería tener dinero como fuera.
“Yo me voy a inventar algo con los pescaditos estos”, era el año 1982 y comenzó a decir que la gente de Valencia había encontrado propiedades curativas en los peces. Henry los colocaba en un gancho de ropa y comenzaba a venderlos.
“Y esos pescados los vende señor”, le decía una mujer… “estos son curativos señora esos están en una parte del lago que es la mejor”. La gente de Valencia comenzó a escuchar las supuestas propiedades y el hombre comenzó a ganar dinero.
Dichas propiedades curativas eran varias… según inventó el mismo Henry y hasta se sorprendía cuando la gente le decía que estaba mejor luego de comer los pescados. “Mire usted no se imagina cuanto me han ayudado esos pescados que usted vende”; le decía un famoso político de Valencia.
Los pescados del Lago de Valencia
De hecho, los hombres buscaban los pescados de Henry y desde Flor Amarillo preguntaban donde era que lo vendían. “Usté se va como que va pa’ Güigüe luego que pase los pueblitos, de Samán Mocho más adelante, allí está”; decía la gente.
Dichos peces supuestamente tenían propiedades afrodisíacas para los hombres. «Mire eso es mejor que el vuelve a la vida, esto es más natural», decía Henry. Y las personas invertían dinero en la compra de dichas especies.
Henry se sorprendía de las cantidades de dinero y de cómo para él era tan fácil sacar el pescado del lago. “Dios mío, vaya poco e’ dinero tengo ahora, yo como que mejor me voy de aquí, antes que me descubran jajajajaja”.
La huida
Una mañana la gente no supo más de Henry pero ya la mentira estaba descubierta. “Ando buscando al hombre ese estafador de los pescados, papá se enfermó luego de comerse eso”; decía una conocida familia valenciana.
“No… él vendió la casa y se fue, ni nosotros sabíamos que él se había ido y eso de los pescados todos por aquí sabíamos que era mentira”; decían los vecinos. Cada vez iba llegando más gente que había confiado en las supuestas curaciones de los pescados…
De Henry nunca más se supo en estas tierras conocidas por el lago, los caracolitos en la tierra que pica… y los famosos pescados milagrosos…
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