Alrededor de las 2 de la madrugada, Prince Royce salió a escena para cerrar la cuarta noche del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar 2018. El llamado «Príncipe de la Bachata» volvía al escenario en el que había debutado en 2012, es decir, hace seis años.
El también jurado de Viña 2018 demostró todo su arrastre con el público y en la Quinta Vergara se sintió a sus anchas: cantó en medio del público, jugó, se cambió de vestuario, se fue sacando la ropa a medida que avanzaba el show (terminó cantando a torso desnudo), repartió besos e hizo un repaso por sus años de carrera.
Temas como «Stand by me», «Soy el mismo», «Yo te amé», «No creo en el amor», «Las cosas pequeñas», «Sensualidad», «Culpa al corazón», «Sabes que te quiero», «Solita», «Soy incondicional», «Ven conmigo» y «Darte un beso» fueron parte de los que interpretó en su segunda vez en el certamen de la Ciudad Jardín.
Uno de los momentos más llamativos de su show fue cuando subió al escenario a dos fans, Rocío y Margarita. La primera no se ganó la aceptación del público, de seguro por ser de Paraguay y la segunda cautivó a los asistentes. Era chilena. El llamado «Monstruo» decidió que Prince Royce la premiara a ella con un beso.
Con información de Tele13