El candidato presidencial estadounidense Donald Trump se encontró este miércoles en el medio de un nuevo escándalo, con dos mujeres que lo acusaron por diversas agresiones sexuales, denuncias que el comité de campaña desmintió enfáticamente.
De acuerdo con el diario New York Times, Jessica Leeds, quien ahora tiene 74 años, afirmó que hace casi tres décadas, durante un vuelo, Trump se aprovechó de la proximidad para manosearla, al punto que ella tuvo que retirarse a la parte posterior del avión y pedir ayuda a una azafata.
En tanto, Rachel Crooks, actualmente de 33 años, relató que en 2005, al encontrarse con Trump en un edificio donde realizaban negocios, el ahora candidato presidencial al presentarse simplemente comenzó a besarla en la boca.
El diario apuntó que Leeds y Crooks comentaron sus respectivos incidentes con amigos y parientes inmediatamente después de lo ocurrido, y que todas esas personas corroboraron sus testimonios.
En una nota oficial, el comité de campaña de Trump dijo que las denuncias eran una pieza de «ficción».
El comité consideró «peligroso» que el New York Times «lance una campaña completamente falsa y coordinada de asesinato de la reputación contra el señor Trump en un tópico como este».
La publicación de las denuncias, añadió la nota republicana, marca un nuevo «pozo hacia donde la prensa está dispuesta a ir en sus esfuerzos para determinar» la elección presidencial del 8 de noviembre.
Trump se encuentra en el centro de un escándalo desde que el viernes de la semana pasada se conoció una grabación de 2005 (conseguida sin su consentimiento) en que se jactaba de usar su condición de celebridad para abusar de mujeres.
En la noche del domingo, durante un debate con Hillary Clinton, se disculpó por el episodio y aseguró que a pesar de haberse grabado esas declaraciones, él nunca había en realidad asaltado sexualmente a mujeres.
Con información de Panorama