Con motivo del Día Internacional en memoria de las víctimas del Holocausto, conmemorado cada año el 27 de enero, la Unesco se moviliza para rendirles homenaje y reafirmar su compromiso en la lucha contra el antisemitismo, el racismo y la intolerancia en todas sus formas.
En el 2017, la Unesco publicó una guía para la formulación de políticas titulada Educación sobre el Holocausto y la prevención del genocidio para proporcionar respuestas y recomendaciones a los interlocutores del ámbito educativo.
La enseñanza del Holocausto consiste fundamentalmente en un estudio histórico de la persecución y el asesinato sistemático, burocrático y auspiciado por el Estado de seis millones de judíos por la Alemania nazi y sus colaboradores.
La enseñanza ofrece también un punto de partida para examinar las señales de alarma que pueden indicar la posibilidad de que nuevas atrocidades masivas ocurran.
La enseñanza sobre el Holocausto permite:
- Demostrar la fragilidad de todas las sociedades e instituciones llamadas a proteger la seguridad y los derechos de todos.
- Poner de relieve los aspectos del comportamiento humano que afectan a todas las sociedades, tales como la tendencia a buscar chivos expiatorios y el deseo de dar respuestas simplistas a problemas complejos.
- Demostrar los peligros del prejuicio, de la discriminación y de la deshumanización, ya sea con respecto al antisemitismo que alimentó el Holocausto u otras formas de racismo e intolerancia.
- Profundizar en la reflexión sobre el poder de ideologías extremistas, así como el odio y la violencia contra determinados grupos.
- Ayudar a construir una cultura de respeto hacia estas instituciones y normas, así como las normas constitucionales resultantes a nivel nacional.
- La enseñanza del Holocausto puede conllevar a una reflexión acerca de la manera en que tales crímenes son recurrentes y sobre el papel que la comunidad internacional debe desempeñar.
Con información de Unesco