Valencia sintió otro temblor. Bueno la capital carabobeña y los municipios cercanos, especialmente Naguanagua, porque se registró a 12 kilómetros del noreste de la capital carabobeña y 21 kilómetros de Puerto Cabello.
Esta vez el nuevo movimiento telúrico fue de magnitud de 4.3 y cuando sus habitantes se encontraban cerca de ir a dormir (9:35 pm) según la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas (Funvisis), con una profundidad de 4,9 kilómetros.
En Naguanagua, sus habitantes desalojaron sus casas y aquellos que viven en conjuntos residenciales de apartamento fueron bajando con calma, sobre todo en sectores donde la luz se fue en ese preciso instante.
No se supo si fue ocasionado por el temblor o casualmente por los constantes cortes que sufren a diario.
Aunque el nerviosismo se sintió y luego de llegar de nuevo el fluido eléctrico, las familias se dirigieron a sus respectivos hogares.
También se pudo conocer que en zonas de Valencia, especialmente por el lado norte, la electricidad falló pasadas las 7:00 de la noche y con el movimiento sísmico, pues el «susto» fue mayor, pero también se mantuvo la calma, que se pide para este tipo de situaciones.
Valencia sintió otro temblor
Por segunda ocasión en tres días que Valencia sintió otro temblor. Según la página de Funvisis, el domingo 25 de agosto, a las 2:44 de la tarde, ocurrió un sismo a 14 kilómetros al noreste, de magnitud de 2.6, con profundidad de 12,8 kilómetros.
Este casi lo dobló con 4.3 y por el mismo sector que alarmó a sus habitantes que se aprestaban a descansar.
¡Calma! pide Funvisis
Por su parte, la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas (Funvisis) remendó mantener la calma, recordando que estos movimientos «son normales en Venezuela».
Agregó que «por vivir en un país sísmico, al encontrarnos en un «contexto geodinámico importante y complejo por la interacción entre la placa del Caribe y la Suramericana, lo que origina actividad sísmica en el territorio nacional».
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