Jamás pensó verse “para toda la vida” en una silla metálica de cuero rojo haciendo algo “que no le gustaba”. Sin embargo, eso se convirtió en su rutina desde 1977, año en el que llegó a Venezuela desde tierras colombianas. Ahora, luego de casi 40 años “no sabe hacer otra cosa”, demostrando así, que para trabajar con amor, solo se necesita disposición.
Sin saberlo y sin quererlo, su padre le había inyectado una pasión vía intravenosa: la barbería, oficio que se convierte en un ritual que debe efectuarse con regularidad, pues “no hay nada como un buen corte de cabello”, así lo han afirmado muchos.
“Mi papá tenía una barbería (…) tuvo que salir a la capital y me dejó ahí, yo no sabía nada de barbería, de repente llegó un campesino y preguntó por el barbero, y yo le dije móntese”, comentó este señor, resaltando entre risas que “yo no sé cómo quedaría”. Justo allí comenzó su camino por este trabajo que se remonta al Antiguo Egipto.
El recuerdo viviente
En el Centro Comercial Profesional, mejor conocido como “Tahití” se encuentra el espacio que ha sido visitado por varias generaciones al pasar de los años: la “Barbería El Trigal”, donde se reúnen padres, hijos y nietos; pues al llegar no dudan en afirmar “yo recuerdo cuando estaba niñito que mi papá me traía”.
Con un matrimonio de 50 años lleno de admiración y 4 hijos, este colombiano sembrado en Valencia los mantiene siempre presente mientras realiza su trabajo, el cual es compartido por una de sus hijas, Sandra, quien también se contagió de esta pasión estética.
Le terminó gustando
Desde bien temprano suena el despertador, y antes de emprender su camino hacia la Urbanización El Trigal Centro, no escatima de tiempo y esfuerzo para limpiar su casa, “eso es lo mío”, desde el patio hasta la acera.
Ya a las 7:00 de la mañana el señor Heriberto Redondo está listo con un cordial saludo para adentrarse al mundo de las tijeras, maquinillas eléctricas, navajas, peines y cepillos; mundo del que no desea irse, aunque no haya sido su elección.
Redacción: Raquel Almérida / Noticias24 Carabobo