Donald Trump con sus últimos mítines podría estar perdiendo votantes y practicándose un harakiri electoral. El contagio por COVID-19 elevó hoy un pico de contagios que no se veía desde abril. Los números han sido nutridos con los infectados de Arizona, Florida, Texas y California.
El martes se reportaron 34 mil 700 nuevos casos de coronavirus. Desde luego los datos provienen de la compilación de la Universidad Johns Hopkins. Las cosas de acuerdo al reporte epidemiológico no están muy bien en Arizona y Oklahoma. En ambos estados recientemente Donald Trump realizó concentraciones multitudinarias en ocasión a su campaña para la reelección. Es así que existe un riesgo estadístico de que algún “asintomático” haya asistido a la concentración. De allí la posibilidad de que para noviembre Trump cuente con algunos votos menos.
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La mortalidad de la COVID-19 es indiscutible en el país que se encumbra como el epicentro de la pandemia mundial. El empeño del presidente de “aparentar” una normalidad podría derivar en un harakiri electoral.
Harakiri electoral en datos
La COVID-19 como tema y variable no podrá ser extraída de la contienda electoral por las presidenciales estadounidenses. La enfermedad producto de una pandemia por coronavirus echó al piso los grande logros de Trump. El empleo, la economía y el PIB eran sus estandartes para venderse como un gobernante exitoso. Y aunque todo lo ha demolido la pandemia y no una mala política, ahora lleva a cuestas el problema racial.
El rastreador de coronavirus muestra sólo otros dos días en los que se registraron más casos del virus: el 9 y el 24 de abril. Este martes 24 de junio es un hecho extraordinario.
El presidente Trump, que ha pedido regularmente reaperturas más rápidas, celebró un mitin en una megaiglesia en Arizona el martes. Poco importó que el estado informara de 3.600 nuevos casos. Trump también celebró un mitin el fin de semana en Oklahoma. El estado de la división Centro Suroeste tiene índices de positividad en aumento. El candidato a la reelección y Presidente de los EE.UU. podrías estar haciéndose un harakiri electoral con estas imposiciones.
En las últimas semanas también han estallado marchas y protestas. El homicidio de George Floyd a manos de una policía racista es la motivación. No obstante los epidemiólogos no están claro si eso está relacionado con el aumento de los casos.
El científico Anthony Fauci, dijo al Congreso el martes que las próximas semanas son fundamentales para frenar el aumento. Él es una parte integral del grupo de trabajo de la Casa Blanca sobre el coronavirus.
«Plan A, no vayas en una multitud. Plan B, si lo haces, asegúrate de usar una máscara», dijo Fauci.
Opinión de sanitarista
Frente al nubarrón que está estacionado en el cielo estadounidense Fauci tiene sus opiniones. Su especialidad no lo califica para hablar del posible harakiri electoral que se estaría haciendo Trump. Sin embargo precisa que «en algunos aspectos, nos ha ido muy bien».
Él es director del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas al Congreso. Ayer alabó específicamente la forma en que Nueva York ha contenido el peor brote del virus hasta la fecha.
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«Sin embargo, en otras áreas del país, estamos viendo ahora una inquietante oleada de infecciones. Parece ser una combinación. Uno de los elementos es un aumento de la propagación en la comunidad. Y eso es algo que me preocupa bastante», dijo.
Más allá muchos asuntos estadounidenses buscan desesperados una normalidad que no es la añeja. Muchos desatienden las normas epidemiológicas. El país tiene una existencia caótica en materia sanitaria. Es de allí que se especula que los movimientos del Presidente son un harakiri electoral que le pudieran costas la Casa Blanca.
