Se cumple hoy 20 de abril, 28 años del adiós de Cantinflas el genio del humor y uno de los célebres cómicos mexicanos. Conocido como El Chato, Mario Moreno, quería estar en el ejército; pero el destino lo no quiso así.
Nació un 12 de agosto de 1911 y se hizo famoso por adoptar a ese personaje que veía en los barrios mexicanos. El típico vago que decía hacer de todo y no hacían nada; Mario Moreno estelarizó ese personaje.
Bailaba, escribía, se vistió de sacerdote, de maestro, doctor y hasta de barrendero para llevar el humor. Mario Moreno sabía cómo dar alegría y hacer reír a la gente a punta de «cantinfladas».
Adiós de Cantinflas
Abrió la puerta a aquel México que quería entrar al mundo y mostrar sus artes escénicas. Empezó haciendo teatro en las carpas pequeñas de circo que abundaban en Ciudad de México. Desde allí supo que tenía talento para el arte.
La comicidad era su fuerte ya que al bailar, y hablar las personas se soltaban a reír. Allí fue cuando Mario Moreno pensó llevar ese humor a las cintas de cine y eso lo consagró. Luego de él vinieron oros cómicos mexicanos.
El personaje interpretado por Mario Moreno era uno de los mejores en el escenario. Ya que mostraba al mexicano de barrio, el que quería impresionar. Se convirtió poco a poco en uno de los cómicos más queridos.
Un grande sin duda
Sin duda ha sido uno de los baluartes más grandes que hay en la comicidad del continente. Las personas nunca olvidarán a Mario Moreno por su calidad en cada película. El adiós de Cantinflas se dio un día como hoy pero en 1993.
Su gracia, talento y ganas de hacer reír y llevar el buen humor lo llevaron a ser uno de los más grandes. Desarrolló un cáncer de pulmón debido al cigarrillo; pero Mario Moreno sigue siendo uno de los más queridos.
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